We can’t solve poverty without solving malnutrition.

La desnutrición es la principal causa de muerte infantil, con 300 niños fallecidos cada hora. También es uno de los mayores obstáculos para acabar con la pobreza. Lo que comen los niños durante sus primeros años de vida influye enormemente en su cociente intelectual, el tiempo que permanecen en la escuela, lo que ganan y, a veces, incluso su participación en delitos. En Guatemala, la mitad de los niños sufren desnutrición crónica. En la mayor parte del África subsahariana, las tasas oscilan entre el 30 y el 45%.

En gran parte del África subsahariana y América Central, el maíz es una de las principales razones. Simplemente no tiene la nutrición que los niños necesitan. Se han pasado décadas animando a las familias rurales a sustituir el maíz por alimentos más nutritivos. Pero las familias rurales siguen comiendo maíz porque es el alimento más barato de comprar, el cultivo más fácil de cultivar y la base de miles de años de cultura.

Nuestro maíz se cría de forma natural para que tenga niveles más altos de los nutrientes más importantes que faltan en la dieta: zinc, hierro y proteínas de alta calidad. Vea a continuación cómo se compara una dieta con maíz más nutritiva con una dieta sin maíz en términos de uno de los nutrientes más importantes: el zinc.

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